El experto en operaciones empresariales, Diego Ayau desglosa las principales acciones económicas impulsadas por algunos gobiernos.
La expansión del coronavirus ha puesto en estado de alerta a todo el mundo. Desde las naciones con más poder hasta las más pequeñas, sin hacer distinción alguna. Y es que el continuo avance del virus obligó a todos los gobiernos a tomar medidas económicas rápidamente para proteger el bienestar de los habitantes y de las distintas redes empresariales de cada país.
Así lo hizo ver la Directora ejecutiva del Fondo Monetario Internacional (FMI), Kristalina Georgieva, quien también advirtió que este año habrá una recesión mundial sólo comparada a la ocurrida en 2008 producto de la excesiva desregulación del mercado, y el colapso de la burbuja inmobiliaria en Estados Unidos.
Asimismo, la experta se refirió a la posible recuperación económica de los países durante 2021 y señaló que esta dependerá en gran medida del tiempo que tome contener el virus.
Una opinión parecida tiene el consultor de operaciones empresariales, Diego Ayau, quien comentó las principales acciones económicas anunciadas por seis naciones del orbe, para enfrentar los efectos financieros que está teniendo la pandemia, como falta de liquidez, endeudamiento y desempleo.
“Mientras los países se adentran cada día más cerca a la boca del huracán de esta pandemia, el rol de todo presidente es encontrar ese punto de equilibrio entre la seguridad del pueblo y el impacto económico devastador a sufrir. Un presidente debe velar porque la solución a esta pandemia no salga más cara que la enfermedad en sí y los ciudadanos deben estar atentos a estas medidas”, declaró.
Sobre EE.UU.
El experto explicó que en Estados Unidos, el Presidente Donald Trump firmó (con la aprobación de la Cámara de Representantes) un paquete de medidas para rescatar la economía del país. Con un presupuesto de US$ 2.2 billones, este programa es considerado el mayor en la historia de ese país y algunos de los puntos que considera son asistencia a empresas, ampliación de la cobertura por desempleo y transferencias bancarias a los ciudadanos.
En tanto, en China, los principales jefes del partido comunista asiático ya anunciaron que preparan un paquete de importantes medidas para reactivar la macroeconomía e impulsar una política fiscal más proactiva.
De esta forma los asiáticos, que el sábado anunciaron no haber registrado un solo contagiado de Covid-19 se preparan disciplinadamente para la primera contracción de su economía, en cuatro décadas de historia.
Asimismo, en España, el presidente de Gobierno, Pedro Sánchez dispuso un plan económico de 17.427 millones de euros que considera entre otras medidas: aplazamiento de impuestos, ampliación del plazo para pago de hipotecas y apoyo financiero al sector salud.
¿Qué pasa en Latinoamérica?
En relación a América Latina, Diego Ayau comentó que los Gobiernos han reaccionado de maneras distintas a la epidemia, tanto en la forma de protección de los ciudadanos, como en el resguardo de la estabilidad económica de sus naciones.
“Las medidas económicas tomadas en cada país difieren entre sí, pero todas tienen el mismo fin: ayudar a las personas más vulnerables, mantener la empleabilidad e incentivar la economía” declaró.
Asimismo, a su juicio “la mejor solución económica es intentar regresar a la normalidad lo antes posible y aceptar que este virus existirá hasta que haya una cura. Para lograrlo y cuidar la salud de los ciudadanos, el principal destino de una medida económica debiese ser incrementar la capacidad de atención médica para los casos graves”, señaló.
El joven, explicó también que en Argentina, el Banco Central brindará nuevos incentivos a los bancos para que incrementen los préstamos a empresas pequeñas y medianas. Además, se prohibió el cobro de cargos o comisiones por operaciones bancarias en cajeros automáticos y suspensión del corte de servicios básicos, telefonía, televisión e internet por hasta 180 días.
En tanto, Brasil enfrentará los efectos de la pandemia con una inyección monetaria de US$ 140.000 millones que incluye liberación de líneas de crédito, aumento de gasto público y entrega de ayuda financiera a los sectores más vulnerables de esa nación.
Asimismo, en nuestro país, los trabajadores y familias más vulnerables del país recibirán un bono de $50 mil.
A esto se suma la postergación por un año de las cuentas impagas por el servicio eléctrico, sin multas y sin intereses y la prórroga de 12 meses por el pago del servicio sanitario, en caso de que los clientes pertenezcan al 40 % más vulnerable del país, sean adultos mayores o personas cesantes.
Algunas medidas gubernamentales a nivel mundial
Respecto a sus reparos sobre cada una de las medidas gubernamentales implementadas en el mundo, Diego Ayau explicó que:
- Cuotas fijas a familias vulnerables: Debe considerarse que el monto fijo definido fue calculado en base a un promedio de ingresos y costos por carga económica. El problema es que, para la media inferior, el monto es mayor al acostumbrado, pero para la media superior, es inferior al estilo de vida habitual. Es una medida de muy corto plazo. A futuro, las personas querrán regresar a la normalidad y comenzaran los saqueos y la violencia, tal y como ya se está viendo en países como El Salvador, Honduras y Guatemala.
- Diferir pagos de créditos: Esta es una de las acciones de mayor impacto a largo plazo. Debemos recordar que los bancos, como cualquier empresa, deben generar ingresos para pagar sus costos. Sus principales costos son pagar los intereses a las cuentas de ahorro de los clientes. Si las personas dejan de pagar sus créditos, ellos no tendrán ingresos para pagar estos intereses y esto generará grandes problemas financieros a futuro.
- Diferir pagos de servicios básicos: Medida con buen impacto a corto plazo ayudando a los hogares a mantener presupuesto para sus necesidades esenciales. El problema, es que al igual que los bancos, las empresas de servicios básicos también tienen costos y salarios que pagar. Al no pagar la luz, la renta, el agua, el internet y otros servicios básicos, privamos a otras personas a no recibir su salario, por lo cual solo se está pateando el problema para otro lado.
- Ayuda a empresas pequeñas: Esta medida es muy acertada. Ninguna pyme cuenta con suficiente capital para mantener a sus empleados y pagar sus costos fijos, sin generar ingresos semana tras semana. Es esencial la sobrevivencia de estas empresas para reiniciar la economía, una vez que la pandemia pase.
- Control de precios: Hay que recordar que los precios son solamente un mecanismo de información. El punto de equilibrio entre la oferta y la demanda. Si el precio sube, es porque la oferta está más baja que la demanda, por lo cual se debe de aumentar la producción. Si se implementa un control de precios, lo único que estamos logrando es desincentivar un aumento de producción que finalmente traerá más escasez de la que hay actualmente.
